El pangolín malayo, también conocido como el pangolín de Sunda o el scaly anteater, es un animal peculiar y fascinante que habita en los bosques tropicales del sudeste asiático. Es el pangolín más grande de todas las especies de pangolines y puede crecer hasta 1,5 metros de largo y pesar hasta 40 kilogramos.
El pangolín malayo se distingue por su cuerpo cubierto de escamas y su cabeza pequeña y puntiaguda. Estas escamas son su principal defensa contra los depredadores y están hechas de queratina, el mismo material que forma nuestras uñas y cabello. Cuando se siente amenazado, el pangolín se enrolla en una bola protectora, exponiendo solamente sus escamas duras hacia afuera.
A diferencia de otros mamíferos, el pangolín malayo se alimenta exclusivamente de hormigas y termitas, utilizando su lengua larga y pegajosa para recogerlas. Además, posee unas garras afiladas y poderosas que utiliza para excavar madrigueras y encontrar sus presas.
El pangolín malayo es una especie en peligro de extinción debido a la caza furtiva y la pérdida de hábitat. Se utiliza en la medicina tradicional y se considera una delicia en algunos países asiáticos, lo que ha llevado a una disminución drástica en sus poblaciones silvestres.
Es importante destacar que los pangolines son animales tímidos y reservados que rara vez se ven en la naturaleza. Si bien es posible avistar uno en un safari, su observación es muy difícil debido a su comportamiento nocturno y su hábitat en la densa selva tropical.
Medidas aproximadas del Pangolín:
- Escala 1:16 - 53 x 36 x 44 mm Al