Agujaceratops mariscalensis es un dinosaurio ceratopsiano que habitó en el período Cretácico superior, hace aproximadamente entre 80 y 72 millones de años, en lo que hoy corresponde al suroeste de Norteamérica, específicamente en la región de Texas. Esta especie fue descrita a partir de restos fósiles hallados en la Formación Aguja, una formación geológica rica en fósiles del Cretácico, lo cual le dio su nombre. Agujaceratops mariscalensis pertenece a la familia Ceratopsidae, caracterizada por dinosaurios herbívoros cuadrúpedos con cuernos y un gran volante óseo en la parte posterior del cráneo. Su estructura física muestra una cabeza robusta y ornamentada, con un cuerno nasal prominente y dos cuernos más pequeños situados sobre los ojos, rasgos distintivos que posiblemente habrían desempeñado un papel en la defensa contra depredadores, en la exhibición social, o en la competencia intraespecífica. Su volante óseo es relativamente amplio y está bordeado por protuberancias que en vida pudieron estar recubiertas de queratina, lo que le habría dado un aspecto aún más llamativo y que, según teorías recientes, podría haber servido también en la termorregulación.
Estudios de la morfología dental indican que Agujaceratops mariscalensis era un herbívoro adaptado a consumir vegetación dura, como helechos y plantas coníferas, abundantes en su entorno durante el Cretácico superior. Su aparato masticatorio estaba compuesto por un complejo sistema de dientes en baterías, que se iban reemplazando constantemente, lo cual le permitía triturar eficientemente la vegetación. Este rasgo, característico de los ceratopsianos, sugiere una dieta versátil y capacidad para procesar plantas de alta fibra. Las estimaciones actuales sobre su tamaño, basadas en restos fósiles bien preservados, sugieren que podía alcanzar alrededor de 5 metros de longitud y un peso de aproximadamente 2 toneladas, colocándolo en un rango intermedio dentro de los ceratopsianos.
Recientes descubrimientos y análisis de restos asociados han permitido obtener datos adicionales sobre su posible comportamiento gregario, dado que los fósiles se han encontrado en agrupaciones, lo que sugiere que Agujaceratops mariscalensis pudo haber vivido en manadas, comportamiento que habría favorecido su supervivencia en un ambiente dominado por depredadores de gran tamaño. Además, las condiciones sedimentarias en la Formación Aguja han aportado pistas sobre el hábitat de este dinosaurio, el cual estaría compuesto por zonas fluviales y llanuras con vegetación densa, ideal para la subsistencia de una especie herbívora. A nivel filogenético, Agujaceratops mariscalensis comparte características con otros ceratopsianos del sur de Norteamérica, aunque muestra adaptaciones específicas en la forma del cráneo y del volante, lo que evidencia una diversificación dentro de los ceratopsios en respuesta a distintos nichos ecológicos. Aunque no se considera una especie extremadamente común en el registro fósil, los restos hallados han permitido entender mejor la diversidad y distribución de los ceratopsianos en esta región del Cretácico, consolidando a Agujaceratops mariscalensis como un miembro relevante de la fauna de la época.
Medidas aproximadas del Agujaceratops:
- Escala 1:35 Completo
- Longitud 132 mm
- Altura 56 mm
- Ancho 38 mm
- Longitud hocico-cola 143 mm
- Escala 1:20 Completa
- Longitud 230 mm
- Altura 97 mm
- Ancho 65 mm
- Longitud hocico-cola 250 mm