Dinocrocuta (D. brevirostris) es un género extinto de mamíferos que vivió durante el Mioceno del periodo Neógeno, aproximadamente entre hace 1,8 millones de años y hace 30.000 años. Este género pertenece a la familia de los hienídos (Hyaenidae) y se caracteriza por ser una especie muy grande y robusta.
Existieron varias especies de Dinocrocuta, siendo las más conocidas Dinocrocuta gigantea y Dinocrocuta brevirostris. D. gigantea fue la especie más grande, con una altura en la cruz de aproximadamente 1,5 metros y un peso estimado de unos 500 kilogramos, lo que la hace una de las hienas más grandes que han existido. En comparación, la hiena manchada actual (Crocuta crocuta) pesa alrededor de 70-90 kilogramos.
Dinocrocuta se caracteriza por tener una cabeza grande y ancha con una mandíbula muy potente y dientes enormes. Los dientes de esta hiena prehistórica eran tan grandes que a menudo se rompían o desgastaban debido a la gran presión ejercida al morder los huesos de sus presas. De hecho, se han encontrado restos fósiles de Dinocrocuta con marcas de mordeduras de otros miembros de su propia especie, lo que sugiere que eran animales muy agresivos y luchaban frecuentemente entre sí.
A diferencia de las hienas modernas, Dinocrocuta tenía patas largas y fuertes, lo que sugiere que era un corredor rápido y ágil. Se cree que esta especie cazaba grandes presas, como mamuts y rinocerontes lanudos, y que también se alimentaba de carroña.
Aunque Dinocrocuta es un género extinto, se han encontrado restos fósiles en muchos lugares de Europa y Asia, lo que indica que tuvo una distribución geográfica muy amplia durante el Pleistoceno. Además, se ha descubierto que esta especie compartió su hábitat con otros grandes depredadores, como el tigre dientes de sable y el oso de las cavernas.
La Pose del Modelo representa un ejemplar de Dinocrocuta en atención del entorno.
Medidas aproximadas del Dinocrocuta:
- Escala 1:20 - 94 x 35 x 102 mm Al Completa