En una costa lejana, un arrecife emergido se alzaba majestuosamente del océano, ofreciendo un refugio para diversas criaturas marinas.
En ese momento, un enorme Pteranodon, con una envergadura de alas que podía superar los siete metros, surcaba los cielos con su distintiva cabeza crestada, su pico largo y puntiagudo y sus membranosas alas extendidas. Sus alas batían con poder, permitiéndole mantenerse en el aire con una gracia sorprendente.
El Pteranodon volaba en círculos sobre el arrecife emergido, buscando su próxima presa. Mientras lo hacía, dos pequeñas aves marinas conocidas como Hesperornis, con su plumaje negro y blanco, emitían chillidos agudos y agitaban sus alas mientras seguían al Pteranodon con sus ojos alerta.
El Pteranodon descendió en picada, su sombra se proyectaba sobre el arrecife emergido mientras se acercaba a la superficie del agua. Las Hesperornis, al percatarse de la presencia del depredador, lanzaron chillidos de advertencia y se dispersaron, nadando rápidamente para ponerse a salvo. El Pteranodon, frustrado, agitó sus alas y se elevó de nuevo en busca de una nueva oportunidad.
Las Hesperornis, habiendo escapado del peligro, se reunieron nuevamente y emitieron llamadas de triunfo mientras nadaban cerca del arrecife, manteniendo un ojo atento al depredador.
Medidas aproximadas de la Base:
- Escala 1:72 - 91 mm largo
- Escala 1:35 - 198 mm largo
La lámina de agua se oferta en resina de alta transparencia
Soporte Pteranodonn en acrílico