El periodo Jurásico es una de las tres partes en las que se divide la era Mesozoica. Abarca desde el final del periodo Triásico (hace 199,6 ± 0,6 millones de años) hasta el comienzo del periodo Cretácico (hace 145,5 ± 4,0 millones de años). El comienzo del periodo está marcado por la extinción de finales del Triásico.
A principios del Jurásico, el supercontinente Pangea se rompió, dando lugar a otros dos grandes continentes: Laurasia al norte y Gondwana al sur.
El Atlántico norte era un mar relativamente estrecho, mientras que el Atlántico sur no se abrió hasta principios del siguiente periodo. El Mar de Tethys se cerró.
El clima era cálido, sin evidencias de glaciaciones. Al igual que durante el Triásico, no hay evidencias de la existencia de tierras emergidas cerca de los polos. Tampoco de la presencia de casquetes polares.
El registro geológico del Jurásico es amplio en Europa Occidental, donde amplias secuencias marinas indican que en esos momentos estas tierras estaban sumergidas bajo mares tropicales.
Las estrictas condiciones del Triásico poco a poco cambiaron durante el periodo Jurásico. El clima cálido y húmedo permitió que el paisaje se cubriera de junglas. Las coníferas siguieron dominando la flora. Las cicadáceas eran también comunes y los helechos abundaban en los bosques.
La fauna del Jurásico estuvo dominada por los dinosaurios, que se dividieron en dos grupos principales: los saurópodos y los terópodos. Los saurópodos eran grandes herbívoros con cuellos y colas largas, y cuatro patas gruesas para soportar su enorme peso. Algunos de los saurópodos más conocidos del Jurásico incluyen el Diplodocus y el Brachiosaurus. Por otro lado, los terópodos eran dinosaurios carnívoros que se movían en dos patas y tenían garras afiladas. Algunos terópodos del Jurásico incluyen al famoso Allosaurus y al Ceratosaurus.
Durante el Jurásico, las formas de vida superiores que poblaban los mares eran peces y reptiles, incluyendo estos a ictiosaurios, plesiosaurios y cocodrilos marinos.
Los ammonites son especialmente comunes y diversos. Aparecen nuevos grupos de invertebrados, tales como los foraminíferos planctónicos, de gran relevancia en estratigrafía o los rudistas, bivalvos formadores de arrecifes.
A finales del Jurásico, los primeros pájaros evolucionaron a partir de dinosaurios. Sin embargo, el aire en este periodo era dominado por los pterosaurios.